(12/12/2014 - mdzol.com)
En una entrevista con Andy Kusnetzoff en
el programa Perros de la calle (La Metro), Gustavo Yankelevich
contó una anécdota muy emotiva relacionada con su hija, Romina
Yan, fallecida hace cuatro años. Relató que, tres días antes de
que ella muriera, él había estado en su casa y habían tenido una
larga conversación. "Estuvimos hablando como cinco horas, algo
poco frecuente. Después, cuando me acompañó al auto, me abrazó y
me dijo: Tengo algo que contarte, algo bueno, de trabajo. Pero
nunca llegó a decírmelo".
A los cuatro días de la muerte de su hija, Yankelevich tuvo un
sueño que lo impactó: "En el sueño estaba ella y me hablaba de
gente que yo no conocía. El sueño era de una nitidez brutal, no
era de esta Tierra, era como un cuento", dijo el productor. A
los pocos días fue a su sesión con su psicóloga, que es la misma
con la que se atendía su hija, y le contó el sueño. "La
psicóloga abría los ojos desorbitada y me dijo: eso era lo que
Romina te quería contar. Ella estuvo con vos, fue a contarte el
plan de algo que estaba escribiendo. Ella lo sabía porque Ro se
lo había contado".
Frente al silencio conmovedor de los que lo escuchaban,
Yankelevich siguió: "Después de eso, llegué a mi casa y me tiré
en el sillón donde había llorado tantas veces y le agradecí a
Dios porque sentí que no la había perdido, que ella está, en
otra dimensión, pero está. Y me di cuenta de que el alma es
inmortal y la vida, eterna. Envidio a la gente que cree, que
sabe eso sin necesidad de pasar por un dolor así".
Escuchá la entrevista en la Metro
(Fuente: mdzol.com)