(16/10/2024)
Por Francisco Martín (Ig: @franmartin30)
En la ciudad de Oslo, Noruega, se realiza
uno de los eventos más importantes de la escena teatral mundial: el Premio
Internacional Ibsen. Por el escenario del National Theatre, locación donde
se realiza la premiación, pasaron multitud de titanes de la literatura como
Peter Brook, Ariane Mnouchkine, y Jon Fosse.
En esta nueva edición
le tocó brillar el talento latinoamericano, pues la consagrada teatrista
argentina Lola Arias recibió el prestigioso "Oscar del Teatro" por su obra
"Los días afuera". Una historia que indaga en la vida de ex-presidiarixs cis
y trans quienes reviven, bajo piezas musicales, la vida detrás de las rejas.
El jurado presentó
sentidos fundamentos para la entrega del galardón, resaltando el
inquebrantable empeño de Arias en reflejar la realidad en nuestra memoria y
cómo esta nos espera también en la incerteza del mañana: "Arias hace
teatro democrático, diverso y arraigado en la experiencia vivida. Su teatro
se relaciona con la sociedad contemporánea, sin ningún dominio intelectual
ni arrogancia. Lola Arias trabaja en los espacios intermedios (entre el cine
y el teatro, la música y la performance, la poesía y la prosa, el teatro y
la vida, el nacimiento y la muerte), forjando un cuerpo de trabajo notable
que reconoce la complejidad de las historias que heredamos y las narrativas
que elegimos forjar a partir de esas historias".
La ganadora subió al
escenario entre lágrimas y, conmocionada por la ovación de aquellos
referentes del rubro, expresó sus más sinceros agradecimientos: “Gracias
al jurado del Premio Ibsen, por haber puesto el foco en una mujer que viene
de la Argentina en este momento, en que el gobierno de extrema derecha de
Javier Milei se empeña en destruir la educación, la salud pública, la
industria nacional, el arte y las instituciones culturales".
También indagó en su
discurso acerca del férreo vínculo que surgió entre el público y lxs
protagonistas, un detalle que demuestra el esfuerzo de la dramaturga por
acercarse a lo humano: "Muchas veces me preguntan: pero ¿qué pasa con lxs
protagonistas de tus obras cuando la obra se termina? La vida ya no es la
misma: han reescrito la historia de sus vidas y la han compartido con el
mundo. Han creado una distancia que les ha permitido verse desde afuera.
Pero la vida sigue. ¿Y qué vendrá? Todas mis obras reconstruyen el pasado,
pero en realidad se preguntan por el futuro. Poder imaginar el futuro es un
privilegio de los que no tienen el desafío de sobrevivir cada día. Quizás
estas obras sean un intento de imaginar futuros posibles".
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