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(17/08/2022)
Por Francisco Martín (Ig: franmartin30)
La serie “Better Call Saul” terminó el 15 de agosto con su
capítulo “Saul Gone”, el treceavo de la sexta temporada. Cerrando con broche
de oro el universo (por el momento) de Breaking Bad, los actores
involucrados en esta aventura se van con una generosa cantidad de dinero y
una reputación popular que nunca habían experimentado. En especial los
protagonistas de esta serie, Bob Odenkirk como el ya conocido Saul Goodman,
y la nueva cara de Rhea Seehorn como Kim Wexler.
El casting para la producción resultó sublime, demostrando actores y
actrices que nunca tuvieron mucha visibilidad en el lente popular o que sus
años dorados ya habían pasado como arena arrastrada por el viento. En esta
nota, se hablará un poco sobre el protagonista y motor central de los
sucesos de Better Call Saul y agente importante en el avance de la trama de
Breaking Bad: Saul Goodman o, mejor dicho, el hombre detrás de él.
Bob Odenkirk nació el 22 de octubre de 1962 en el estado de Illinois,
Estados Unidos. Desde joven siempre tuvo una personalidad carismática,
graciosa, e inquieta. Le aburría su pequeño pueblo Naperville y siempre
buscaba hacer cosas emocionantes. Su personalidad abrió las puertas del
camino del comediante, una vocación soñada. Comenzó trabajando como
guionista en una radio universitaria local (él estudiaba en la Universidad
del Sur de Illinois Carbondale) para luego pasar a producir su propio show
de radio. El bicho de la actuación y la performance le picó al joven Bob,
inscribiéndose en clases de teatro. Dio su salto a la televisión como
guionista para Saturday Night Live y otros programas.
Luego, pasaron sus mejores años en los noventas con “Mr. Show” (1995 –
1998), una serie de comedia y sketches popular en los Estados Unidos junto a
David Cross y otros comediantes más aficionados. Al terminar la serie poco a
poco se originaron inconvenientes económicos que aumentarían en gravedad.
Los papeles no llegaban y su vida fue conquistada por la ansiedad del día a
día, terminando en plena quiebra.
Es aquí donde Peter Gould, escritor dentro de la producción de Breaking Bad,
le propuso el papel que le cambiaría su vida: el del abogado astuto y
timador Saul Goodman. En el momento, Bob dudó mucho de aceptar el papel, el
personaje no le llamaba mucho la atención al inicio y Breaking Bad no era un
éxito en esos momentos con su primera temporada, por lo que existía ese
invasivo pensamiento de que quizás no le ayudaría con su situación monetaria.
Sin mucho que perder, en 2009, gracias al incentivo por necesidad, tomó el
papel.
Por esa necesidad lo dio todo en avivar ese personaje que se mostraba en los
guiones de Breaking Bad. Esos esfuerzos dieron sus frutos, logrando inundar
las encuestas de popularidad de la serie, quedándose por el resto de las
temporadas, y generando con su carisma una demanda tal de los fanáticos que
resultó imposible no pensar en hacer una serie entera con su personaje como
centro de atención.
Ya el resto es historia. Las ofertas llovieron, entre ellas un papel
protagónico en la película de acción “Nobody”, inspirada en “John Wick”, un
icónico papel en la serie “Fargo”, y nuevos proyectos que llamaron la atención
del actor (puede que, incluso, veamos nuevo contenido muy pronto).
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